COVID-19 y desarrollo estratégico del Talento

Ricardo De la Cruz Gil
La pandemia del COVID-19 esta terminando de transformar al mundo a un ritmo vertiginoso. El mundo empresarial y laboral no son ajenos a todos estos cambios.
La respuesta por parte de los gobiernos con medidas como el aislamiento social generaron también un impacto en la economía, deteniendo el crecimiento en varios sectores, con un impacto directo en la producción, la interrupción en la cadena de suministros, restricciones en los transportes, marítimos, terrestres y aéreos;
Definitivamente sus resultados se hicieron y se hacen sentir a nivel global desde Asia y Norteamérica hasta la frágil economía Latinoamericana y Europea , afectando la mayoría de sectores económicos, existiendo un decrecimiento y desaceleración económicos , todo ello impactó considerablemente en la producción y rentabilidad de muchas empresas, desde el sector manufacturero, agrícola, minero, de servicios, turístico y un largo etc.
Las empresas no importando su tamaño, se han visto afectadas, muchas han tenido que cerrar, despedir gente o reinventarse y muchas veces no verán una recuperación hasta un mediano y largo plazo.
Es innegable la repercusión que esta crisis tiene sobre los mercados financieros y la rentabilidad económica de las empresas, Supone también un cambio en las formas de trabajar, un cambio de paradigma de la presencialidad al teletrabajo, surgiendo nuevas formas de interacción laboral. Las organizaciones y las personas están teniendo que adaptarse a esos nuevos cambios que suponen el aislamiento, muchas organizaciones han tenido que reinventarse, reinventando incluso su modelo de negocio para sobrevivir y paliar el impacto de toda esta crisis.
«Las personas han surgido de esta crisis como la fuente principal de generación de valor en las organizaciones».
Ante este nuevo contexto el talento de la gente está demostrando su valía; Hoy más que nunca el talento humano, las personas y sus capacidades se han convertido en el recurso más valorado, es el talento, son las personas quienes están ayudando a salir a flote a las organizaciones, ya no son las maquinarias, las instalaciones, es la gente, son sus capacidades las que están ayudando a las organizaciones a adaptarse, a reinventarse a seguir generando valor. El papel del líder es muy importante como promotor de las capacidades de sus equipos. Esta nueva condición supone un nuevo reto para poder gestionar el talento en este nuevo contexto y en el que supone la fase del post- COVID- 19 surgen muchas preguntas para los gestores del talento humano como ¿Qué nuevas habilidades se requieren para ponerlo en práctica de manera efectiva? ¿Cómo gestionarlo?¿Cómo contratarlo? ¿Qué condiciones son importantes para poder desarrollarlo efectivamente?. Nunca antes la gestión del talento había sido tan compleja, todo esto nos lleva a reconocer que pese a que muchos directivos y empresas reconozcan la importancia estratégica del talento humano en las organizaciones pocas son capaces de poder gestionarlo exitosamente.
Para asegurar el éxito competitivo en esta nueva fase post Covid – 19, no basta con captar el mejor talento existente en el mercado, el futuro laboral y empresarial post covid-19 requieren de las organizaciones y sus líderes de un trabajo sostenido de construcción de organizaciones basado en el talento, que gestionen adecuadamente las capacidades necesarias para competir en sus respectivos mercados y ante los nuevos cambios ocurridos en estos, se requiere no solo sensibilidad externa para detectar los cambios en el mercado y adaptarse a estos , fortaleciendo la estrategia empresarial para tal fin, sino también una mirada interna que permita enfocarse en el desarrollo de su propio talento para alinearlo a esa estrategia
«El nuevo reto de la organización y sus líderes ….es reconocer que el talento,..tiene una importancia estratégica»
El nuevo reto de la organización y sus líderes si desean seguir siendo competitivos en ese nuevo mercado, es reconocer que el talento, las capacidades de su gente tienen una importancia estratégica y que la estrategia del capital humano debe estar presente y alineada a la estrategia empresarial.
Reconocer la importancia estratégica del talento pasa por considerar la gestión del talento como una habilidad fundamental que deben aprender a desarrollar la organización y sus directivos. El coaching y la PNL, como metodologías de desarrollo del potencial humano y fortalecimiento de capacidades se constituyen en este contexto como estratégicas para toda organización orientada al desarrollo del talento y al logro de resultados, de ahi su notable importancia ahora mas que nunca para toda organización que desee no solo superar esta crisis, sino buscar salir fortalecida de la misma.